Su timidez no le había permitía abordar a la mujer a la que en secreto, amaba desde hace ya, mucho tiempo.
Aquel día de la madre
compro regalos para su abuela y su madre. Entonces se le ocurrió que esta sería
una buena oportunidad para tener un detalle con su amada, que le permitiera
expresarle su interés.
Maricarme, le dijo
con todo el romanticismo del que fue capaz, te he traído este detalle por
el día de la madre; estiro el brazo, con una estupenda bolsa de regalo en la
mano.
Pero quien te dijo que yo
era madre, de donde has sacado esa conclusión? yo no tengo hijos, ni pienso
tenerlos, además soy demasiado joven aun para haber tenido alguno.
Si, lo sé, dijo Edilberto
bajando la cabeza, avergonzado.
AAAAAAAAAAA, ya entiendo,
dijo Maricarmen, tú lo que quieres es follar; ven, entra le dijo, vamos a
follar; trajiste condones? Y, sin esperar respuesta continúo, es igual yo
tengo; lo tomo de la mano y lo llevo hasta su habitación.
De esto hace más de una
semana, tiempo desde el cual Maricarmen y Edilberto, no has sido vistos por
ningún lado.
Carlo Malosso
No hay comentarios.:
Publicar un comentario